Parece que ya tienen ultimado los etasunos el cese de la violencia terrorista. Es una cosa que desde hace veintitantos años parecía lógica y evidente, una vez comenzada la etapa democrática en España y la amnistía que sacó a los etarras a la calle.
Y es que el argumento parecía sólido.
A partir de entonces, el asesinato no podía reportar beneficios de ningún tipo al movimiento independentista vasco. Por una sencilla razón, se podía votar a partidos del MLNV. Asi que lógicamente, si mataban conseguirían lo contrario en una sociedad moderna y sana.
No debíamos ser muy modernos y desde luego de sanos nada.
No fué así. No dejaban de matar. Mientras ellos mataban, sus compañeros de viaje del PNV de donde habían salido al fin y al cabo, medraban y medraban...e imponían en la sociedad las consignas y las pautas del MLNV.
Medraba el PNV y medraba Etasuna y entre los dos se repartían los ayuntamientos. Se impuso el euskera batúa que inventaron como lengua, mediante decretos e inmersiones linguísticas la han convertido en su seña de identidad y su herramienta de discriminación. Es sencillo, si no tienes el nivel exigido no hay trabajo.
Y seguían matando, y se seguía imponiendo su modelo... fueron desapareciendo de nuestra sociedad cualquier referencia a España, no ya la bandera sino cualquier otra cosa. Y mientras se cambiaban los nombres a las calles y florecían Sabino Arana kaleas y similares también se cambiaban los nombres el personal, y aquellos Ignacios ahora eran Iñakis los Pedros Peios o los Fernados Pernandos, Juan pedro pasaba a Jon Kepa e Iríbar salía con la ikurriña a San Mamés de donde ya nunca más saldría. La ikurriña, claro.
Y seguían matando y ya formaba parte del paisaje y, claro, como a aquellos gudaris o luchadores patriotas se les homenajeaba y se les ensalzaba públicamente pues la cosa se iba normalizando hasta que por fin, se ha convertido en lo normal. Hoy si paseas por esta tierra, seguro que no verás una bandera española como no sea para verla en una diana, pero verás a cada paso fotos y carteles ensalzando a los etarras. Ikurriñas millones, su bandera, la de los etarras, la del MLNV.
La bandera de un racista indecente.
Y Eta seguía apoyando el movimiento hacia el totalitarismo. Y los totalitaristas veían con agrado a Eta.
Hoy vemos que efectivamente, Eta no dejó de matar porque le seguía saliendo rentable. Consiguieron, al alimón con el gobierno, crear esta vasquilandia repleta de esquizofrénicos estructurales donde florecen como setas las ciudades de la paz, los comités de derechos humanos y las manifestaciones proderechos colectivos de cualquier colectivo mientras no sea relativo al millón largo de personas presas en su propia tierra por una ideología repugnante, mezcla de victimismo, envidia y aldeanismo paleto.
Incluso el tremendo asesinato de Miguel Angel Blanco, que consiguió despertar a la sociedad española de su modorra acabó siendo positivo para Eta, que consiguió al fin que el PNV se subiese al monte definitivamente con ellos, de cara a la galería, algo trascendental para acabar de otorgarles la pátina que necesitaban. Y vino el pacto de Estella con su declaración y su pacto entre Eta y el Pnv.
Y ahora por fin, a las puertas ya de la independencia, con las riendas del poder en sus manos y un gobierno títere de plastilina pero con el que tienen en común los etarras infinitamente más que con el del PP, ante el que era impensable cualquier cese de los asesinatos sin que los etasunos lo entendieran como una rendición.
Llegó el socialismo al poder y ahí vieron su puerta abierta Etasuna a la que el 11M había puesto contra las cuerdas. Increíble pero cierto, podían matar mil personas y seguían siendo los luchadores por la libertasd para demasiados izquierdistas, llegaros los moros y masacraron doscientos de una tacada y, de repente, una acción de Eta parecía inpensable. No podían hacer lo mismo ellos, eran terroristas buenos, lo decía el Pais...lo decía Zapatero.
Violencia contenida... el nombre de este blog, una frase de ZP para ir soltando poco a poco lo que hoy señala Blanco, que esperan el cese de la actividad armada, no una tregua.
ZP pues les abre a Etasuna el camino de la salida victoriosa, ahora ya no se interpretará su cese de actividades homicidas como una derrota, ahora es una victoria en toda regla.
Total, ya nos han contado hasta los Ibarras que ellos, antes que un pepero, un separatista.
Ahora toca discutir cómo y cuando salen los presos a la calle, a disfrutar de sus carreras universitarias y de las poltronas oficiales a que tiene pleno derecho, como luchadores de este pueblo que son y han sido.
Y como el Gara denomina hoy, a lo mejor lo que tenemos a patadas en esta vasquilandia es violencia invisible...
¡Que bonito es ZP que nos ha traído la paz!...y de paso, el nacionalsocialismo.
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