Los del Gara están exultantes, muy contenidamente, ya saben como son estos chicos, que practican la violencia contenida.
Y aunque en la pág de la noticia afirman que lo han cesado por motivos profesionales, (han copipasteado a los de El Pais hasta las comas), en "opinión" Martín garitano dice que no quiere alabar a Pumpido, el bombero pirómano, pero califica de espléndida noticia la desaparición de su bestia negra:
(se han eliminado insultos innecesarios para la correcta comprehensión del texto)
Nueva
Eduardo Fungaririño se va. Se va poco, pero se va. Al menos de la Jefatura de Fiscales de la Audiencia Nacional. Se mire por donde se mire, es una buena noticia.
Ya sé que la bondad de la nueva no es suficiente. Ahí sigue la Audiencia Nacional como tribunal de excepción, sucesor directo e indiscutido por indiscutible como tal del Tribunal de Orden Público que se creó por orden directísima de Francisco Franco y en el que trabajaron tantos y tantos progenitores de actuales directivos del PP, pero, qué quieren que les diga, a mí me parece una buena noticia que Fungairiño pierda punch en tan excepcional y denostable tribunal.
Y es que a mí se me antoja difícil imaginar a un bueno sin conocer que concentre más rencor, mala leche y exhiba mirada más torva hacia todo lo que suene a vasco que el dimisionario. Ejemplos abundan en las hemerotecas y en la memoria de los miles de ciudadanos vascos que hemos tenido la triste ocasión de acudir a las dependencias en las que ejercía de mandarín fiscal
Dicen que ha dimitido por «incomodidad» con Cándido Conde-Pumpido, el Fiscal General del Estado nombrado por el PSOE. No lo dudo.
Se va de la jefatura, imagino, sulfurado. Dispuesto a atesorar sed de venganza contra los que, desde la confianza del PSOE, le han negado el protagonismo que necesita como los peces necesitan el agua y, confío, contra los que le han puesto las cosas claras y le han recordado que no serán un puñado de jueces y fiscales filofranquistas los que van a condicionar el futuro.
Ni un solo voto de confianza hacia Conde-Pumpido en estas líneas, pero Fungairiño lo deja. Y esa sí que es una buena nueva. -
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