O de cómo convertir un potentísimo medio de comunicación en un arma de destrucción masiva.
Quizás el símbolo pudiera ser Garci saliendo tras diez años de TVE, el último mohicano.
Porque el panorama es desolador, y no lo digo sólo por las galas de nochevieja aunque también, que no son sino la diadema de toneladas de GH, salsa rosa, aquí hay tomate, informativos y deformativos,etc etc etc.
O los cortes publicitarios, de una violencia brutal, con imbéciles que aparecen gritando ¡compra compra compra! en medio del suspense o la acción mas trepidante.
Lo digo porque zapear entre la "diversa" oferta a cualquier hora es deprimente.
Televisiones todas, entusiastas del share y de la imagen políticamente correcta. O sea, de izquierda. Y para aumentar la pluralidad nos dice ZP, la Cuattro y polancandia en abierto. Que no sólo los adinerados de clase alta tienen derecho a ver televisión "de izquierda", ¿verdad señor Don Kane?.
Le acabarán poniendo estatuas en las plazas, como a Sabino Arana o a sus adeptos etasunos.
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