Dentro del campo de la ingeniería social, no hay como ver las barbas del vecino pelar, para poner las tuyas a remojar. A partir de una noticia aparecida hoy en El correo "nuevos brotes de violencia interpalestina hacemos una proyección neuronal vacilante y vemos el resultado.
Tan sólo se cambian los nombres personales, el resto queda igual.
¿Cómo lo ves?
Nuevos brotes de violencia intervasca.
La policía vasca se enfrentó ayer a milicianos etasunos en una nueva jornada de violencia intervasca en la franja de Iparralde, que se saldó con trece personas heridas, incluídas nueve agentes, dos milicianos y dos civiles.
Según el movimiento de resistencia etasuno, los incidentes se iniciaron por la mañana, cuando la policía trató sin éxito de detener a un gudari. Inmediatamente comenzaron los choques, que duraron vaias horas y en los que, además de los heridos, varios vehículos resultaron destrozados.
Por la tarde, las fuerzas de seguridad impidieron que los miembros de Jarrai dispararan granadas de mortero jo ta ke contra los asentamientos de maketos al otro lado del Adour y un grupo de miembros de las juventudes del PNV se sumó a los agentes en la lucha contra los gudaris.
Finalmente, los dirigentes del grupo fundamentalista renovaron sus declaraciones en el sentido de que siguen adhiriendose a la tregua que está en vigor y que se ha roto en los últimos días con las torturas policiales.
Lo cierto es que Etasuna trata de establecerse como una fuerza alternativa a la policial.
Ayer, varios patriotas de izquierda detuvieron durante horas a dos agentes para interrogarlos y exigieron a otros que les presentaran sus documentos de identidad con el fin de reconocerlos por si mas adelante quieren tomar represalias.
El presidente de la CAV, Ju Anjo Ibrh (Abú Spock) volvió a advertir de que no va a tolerar que los gudaris se enfrenten a las fuerzas de seguridad.
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