Se está juzgando a cinco personas por el genocidio camboyano, muerto ya Pol Pot.
Masacraron la cuarta parte de la población, millón y medio de personas.
No se piden indemnizaciones, tan sólo reconocimiento moral.
Yo no he oido nunca a nadie aquí pedir justicia ni memoria histórica para aquella gente y aquél régimen no ya autoritario, si no directamente asesino en masa.
Aquí se exige todos los días que se juzgue a Bush, a Aznar, al régimen de Franco 70 años después, ¡los mismos que allí pululaban felices en la dictadura, bien arraigados con sus familias!
Tenemos jueces estrella, que persiguen a los dictadores... pero sólo de derecha. Los de la izquierda arrastran comprensión y respeto siempre, como ahora Hugo Chávez, modelo de demócrata y de democracia para el Psoe o el Gara.

El doble rasero en juzgar crímenes y abusos dependiendo de de dónde vengan convierte los discursos y las palabras en garabatos mentales.

Así será un holocausto que mueran unos palestinos, una justa venganza que mueran unos judíos y que en los regímenes comunistas que apoyan mueran millones de personas asesinadas eso no les preocupa ni molesta, ni tan siquiera se puede hablar de ello. No interesa.
Pero se siguen como modelos.